Albergue Joy Plaza de Armas

Cuando contratamos mi pareja y yo el alojamiento en dicho lugar no había información sobre su verdadera naturaleza, pues lejos de tratarse de un hotel, en su lugar, es un simple albergue, extremadamente caro en el que resulta imposible descansar. Es frecuentado por jóvenes que buscan ir de fiesta y despedidas de solteros, por lo que el descanso es imposible. Allí no existe orden ni ley. Pero nadie te informa a la hora de contratarlo. De igual manera en las páginas de búsqueda de hoteles y alojamientos aparece como hotel y no como albergue.
Por otra parte, la habitación era raquítica, sin tele, sin artículos de aseo e incluso sin armario. 
Así mismo, el aislamiento acústico del emplazamiento es nulo y se escuchan todos los ruidos, tanto del interior como del exterior del edificio.
El desayuno podría catalogarse como triste y carísimo. Te obligan a elegir entre tres opciones en una imagen y luego cuando te lo ponen es una verdadera gaita. 
Y finalmente, para rematar, te obligan a bajar tus sábanas el día en que dejas el hotel, después de haber pagado un dineral y bajo la amenaza de que si no lo haces, pierdes tus 5€ de fianza; un detalle del que no te avisan personalmente y lo hacen a través de una tarjeta en la que, si no pones atención, no lo descubrirías y perderías ese dinero.

El staff del hostal muy simpático. Dando facilidades para todo

:lol: la atención de los empleados de recepción y cafetería, excelentes. El joven recepcionista de la tarde, muy atento y fué de muchísimo valor sus indicaciones a la hora de caminar por las calles de Sevilla. Con gusto volvería a hospedarme en Oasis.

Aunque pongas el cartel para que limpien la habitación no hacen ni la cama... Mi pareja terminó llena de picaduras de insectos. El desayuno el primer día bien, pero a partir del segundo le faltaban la mitad de los menús. Lo mejor llegó cuando al irnos, nos dijeron que éramos nosotros quienes debíamos deshacer la cama y llevarles las sábanas para lavar... .Barato.