Opiniones del hotel Epidavros

Una vez recorrido el trayecto que media entre Omonia y el hotel, superados los prejuicios por el aspecto de la gente que te encuentras en la calle -es un barrio con muchos emigrantes, donde no faltan su toque de prostitución ni el "menudeo"- y comprobar que son inofensivos -cuidado en cualquier forma con bolsos y demás tentaciones colgantes propias de cualquier turista-, te olvidas enseguida del enclave. Ayuda a ello un servicio atento. El desayuno no está mal, acostumbrado a lo que te pueden dar en hoteles de ese precio en Grecia y muchos otros puntos de Europa. La habitación, por último, es agradable -¡la ducha tiene cortina!- y, en nuestro caso, tranquila, que era una de las cosas que más nos preocupaban, al ser ambos de dormir ligero.

Nos pareció un muy buen hotel: los recepcionistas muy atentos, cálidos, nos ayudaron con todas nuestras dudas. Muy bien el desayuno, la limpieza de las habitaciones, la seguridad. Ayudaron con taxis, valijas, recomendaciones. La calefacción excelente. La ubicación es buena, se llega rápido a todas partes. El precio muy acorde a nuestras posibilidades, y lo mejor: el orden y la tranquilidad cada vez que llegábamos... Saludos a la gente del Epidavros!! Susana Torres y familia!!!! desde Argentina